Tomás H. Jerez

jueves, 6 de septiembre de 2012

EXIGENCIAS DE LA “PARTICIPACIÓN ACTIVA”


La participación es una exigencia de la naturaleza misma de la liturgia. Ésta consiste en estar presentes activamente en la acción mistérica de Cristo actuada en la celebración. La liturgia es el medio como se ejerce la obra de nuestra redención[1]. Cuando los files participan de la celebración están en situación de presencia en el acontecimiento histórico de la salvación y ejercen en Cristo, por Cristo y con Cristo siempre presente y siempre vivo, su sumo y único sacerdocio.