Tomás H. Jerez

sábado, 21 de abril de 2012

LA CELEBRACIÓN DEL TIEMPO PASCUAL

Criterios históricos y teológicos han devuelto al tiempo pascual su carácter cincuentenario, un tanto olvidado durante siglos. Fundándose en ellos, la reforma del concilio Vaticano II ha restablecido en los libros litúrgicos actuales el genuino sentido de la pascua. Con su ayuda, la comunidad que celebra la pascua descubre su sentido. Así es claro en los prenotandos del Misal Romano, donde se dice taxativamente que los cincuenta días que van de la resurrección hasta el domingo de Pentecostés han de celebrarse con tal alegría y exultación, como si se tratara de un solo y único día festivo, como "un gran domingo" (san Atanasio).