La Igleisa necesita de santos, lo sabemos, y ella necesita también de artistas hábiles y capaces; los unos y los otros, santos y artistas, son testimonio del espíritu que vive en Cristo (Pablo VI Carta a los miembros de la Comisión Diocesana de Arte Sacra. 4 de junio de 1967).
Tomás H. Jerez
▼
viernes, 23 de marzo de 2012
LA EUCARISTÍA EN LA ANALOGÍA DE LOS MISTERIOS

Con la teología trinitaria. Son muchas las relaciones
de la Eucaristía con la Trinidad. Es el don del Padre, la presencia del Verbo
encarnado, muerto y resucitado, la efusión del Espíritu Santo. En la celebración
litúrgica, la plegaria eucarística expresa, con toda su riqueza, el dinamismo
trinitario descendente y ascendente de la historia de la salvación que culmina y
se hace presente en la Eucaristía. Es un misterio que lleva en sí una
característica impronta trinitaria y la inscribe en el misterio de la Iglesia y
del cristiano, el cual accede a la plenitud de la vida trinitaria por la
Eucaristía, hecho partícipe de la divina naturaleza (UR 15).